El reportaje interpretativo acude en auxilio para que los periódicos no
mueran, pues cuenta historias sobre las ciencias con rigor científico pero
llenas de imágenes literarias, de recursos estilísticos, de investigaciones
sesudas, de documentados datos, de especializadas citas, de precisos cuadros y
esquemas, de espectaculares infografías, de contextualizadoras líneas del
tiempo y de puntuales columnas de opinión. La argentina Diana Cazaux presenta
al reportaje interpretativo científico como un género periodístico con futuro,
pues su estructura permite presentar en todo su esplendor una investigación
periodística especializada en ciencia que, además, despierta el interés “por
saber más” y ofrece a los lectores dónde profundizar estos conocimientos.
